La agencia Dicyt (Agencia Iberoamericana de Noticias para la divulgación de la Ciencia, Educación y Cultura), señala en un informe recién publicado (noviembre 2017), que en pastos afectados por la minería los animales "de carne" pueden ingerir demasiado arsénico, que luego pasará al ser humano.
Salamanca es una de las zonas afectadas, una provincia que provee de carne a muchos mercados nacionales e internacionales.